S.T.A.L.K.E.R. Shadow of Chernobyl. Si esto hubiese sido la realidad, las terribles consecuencias del Reactor 4 tendrían algún sentido.
Ahora comprendo porque todas las revistas del momento lo calificaron como uno de los grandes videojuegos del año. La verdad es que a pesar de contar con cuatro años a su espalda, el tiempo parece haberse quedado estancado en la Zona de Chernobyl. En el único aspecto que se le nota la edad, podría decirse que son las escenas cinemáticas, donde se puede apreciar que les falta un poco de experiencia en la elaboración de escenas por ordenador. Pero por lo demás la verdad es que me ha dejado más que impresionado. Así, que voy a proceder a desarrollar mis impresiones sobre STALKER.
Nada más
ponerme a la faena, es decir, una vez pasado el tiempo requerido para la
instalación y configuración del juego. Me he quedado alucinado de la enormidad
de terreno disponible para explorar y disfrutar. Si bien es cierto que STALKER
parece a primera vista un típico shoot’em up. La verdad es que esto queda
bastante lejos de la realidad, pues añade bastantes aspectos que podemos
encontrar en cualquier juego de rol. Lo primero es la cantidad de misiones que
a medida que me voy adentrando en la historia, se me van ofreciendo. Como cabe esperar,
las misiones más desarrolladas o con mayor trama son las que siguen el guión
del juego. Pero la verdad es que recoge un poco del espíritu que encuentras en
la extraordinaria saga de videojuegos de rol The Elder of Scrolls. Con la
diferencia por supuesto de que nos encontramos en un futuro próximo, aunque dada
la fecha en la que yo me lo acabo de jugar no es que se encuentre muy lejano.
La verdad es que la historia es muy buena, a pesar de que en ciertos momentos
llego a desilusionarme al darme ciertos datos que parecieron acabar con toda la
originalidad del guión. Giros inesperados y un final abierto a varios posibles
desenlaces me han dejado completamente satisfecho. La verdad sea dicha, la
historia es digna de cualquier novela de ciencia ficción. Y a pesar de no
haberme podido jugar juegos como el The Witcher o Metro 2033, ambos tomados
directamente de una serie de novelas. Aunque el ambos se encuentran en mi
estantería de juegos tentándome continuamente a jugármelos.
Estoy más que seguro que Stalker se merecería como mínimo ser la base para una buena colección de novelas. Algo que otros videojuegos ya han tenido la suerte de lograr. Como podéis imaginar, la historia me ha tenido pegado a la pantalla hasta que por fin he logrado terminármelo. El hecho es que nunca me hubiese decidido a comprármelo, principalmente por dos razones. La primera debido a que cuando Stalker vio la luz, yo no me encontraba muy interesado por los juegos de PC (la PlayStation 2 me tenia comida la cabeza). Y la segunda, es que mi nivel adquisitivo se encontraba algo reducido por lo que contando con que los precios de los juegos no habían visto la reducción que hoy en día se aplica por lo que debí dejarlo pasar. Pero retomemos la razón por la que de nuevo me decidí por Stalker, pues es sencillo, el COD4 MW (o lo que es lo mismo Call of Duty 4 Modern Warfare) tiene una de sus misiones desarrollada de manera espectacular en Pripyat, y la verdad es que resulta extraordinario moverse entre calles y edificios completamente abandonados de esta ciudad fantasma. Así que retomando un poco la historia de los videojuegos, recordé que hacía unos años, salió Stalker, que precisamente se juega en un entorno semejante. Por lo que tratando de revivir la experiencia de COD he tenido la suerte de disfrutar de un juego (a mi parecer) mucho más divertido y por supuesto extraordinariamente más largo.
A pesar de
tratarse de un shoot’em up, la verdad es que en mi opinión, tendríamos que
ponerlo en el género de rol. Aunque también es cierto que predominan la acción
de disparos y la interactuación con los personajes o las posibilidades de
desarrollo del personaje quedan bastante limitadas. En cierto modo, se echa de
menos la posibilidad de modificar las características o personalizar las
habilidades del protagonista. Pero sin embargo contamos con todos los demás
elementos de este tipo de juegos, un montón de misiones dentro de la misma
historia, distintos lugares a los que viajar y explorar sin obligación a seguir
el argumento hasta que lo consideremos oportuno, comprar y vender todo lo que
encontremos, negociando tanto con los personajes principales como con los
secundarios. Y por supuesto un elenco de armas y equipamiento extraordinario,
al que tendremos acceso según nos liemos con unos o con otros. Otra de las
cosas buenas, de este juego, es que no podemos llevar activas más que cuatro
tipos de armas. Una cuerpo a cuerpo, una corta, una larga y granadas. Aunque contamos con una mochila de gran capacidad, en
la que podemos guardar las armas y la munición que adquiramos por el método que
sea. Y siempre nos veremos obligados a acudir al inventario se queremos
modificar alguna de ellas. Además se han introducido la necesidad de comer, con
lo que nos vemos obligados a tener que dejar espacio para latas u otras viandas
que nos permitan mantener el ritmo. Otro de los factores es el tiempo, a pesar
de la libertad de decisión, algunas misiones nos exigen tener que estar
pendientes de la hora del día. Esto es quizás uno de los pequeños fallos que
tiene el juego, a pesar de que los días pasan, amanece y anochece, la
diferencia de luz no es muy clara. Las noches son demasiado claras, y los días
en algunos momentos parecen noche. Imagino que en esas latitudes los días no
deben ser muy claros, pero la noche siempre es oscura, sea donde sea, por lo
que cuando nos encontramos en el exterior, la necesidad de usar la linterna o
la visión nocturna es nula. Pero a pesar de esto, los escenarios son
extraordinarios. Las regiones boscosas son increíbles, pero lo mejor son los
entornos urbanos abandonados. Centros de investigación, bases militares,
pequeñas aldeas, fábricas o la propia central de Chernobyl resultan
completamente creíbles y abrumadoras en su abandono. Cuando te mueves por entre
sus habitaciones, salas y pasillos, no puedes evitar sentir la desolación y
tratar de imaginar cómo debieron ser cuando estaban habitados. La verdad es que
los creadores han plasmado la atmosfera de los años de la guerra fría, creando
o recreando aquellos edificios de la arquitectura soviética. Por lo que cada
nuevo lugar es como una visita a aquellos años dejados atrás tras la caída del
comunismo.
El diseño de personajes es bastante bueno, puede que falte un poco de variedad entre los personajes secundarios. Pero la mayoría de juegos propios de rol, sufren estas mismas deficiencias por lo que no creo poder considerarlo un punto negativo. Por otro lado, se nota que el juego pertenece a la nueva generación y los personajes principales están perfectamente diseñados. La pena, es la falta de variedad de mutantes, la verdad es que en cierto modo, se comprende al tratarse de dar al juego un cierto toque de realidad, donde los monstruos deben de ser algo tan poco común que cada vez que aparecen deben de causar mucho impacto en el jugador. Esto realmente se consigue, especialmente en los laboratorios abandonados donde estas criaturas campan a sus anchas y convierten el juego en un entorno aterrador. La verdad es que resulta muy inquietante moverte en esos pasillos oscuros y abandonados, donde luces de emergencia siguen alumbrando a pesar de que ya no alertan de nada. O habitaciones donde fluorescentes ya gastados parpadean creando una escena realmente inquietante y tenebrosa. Por supuesto todo ello acompañado tanto de voces, en ucraniano o ruso, gritos provenientes de lugares no explorados o ruidos de objetos al caer o romperse. A lo que añadimos una banda sonora más que adecuada a cada momento de la aventura.
El aspecto
más agresivo del juego, es decir el armamento, es extraordinario. Llevado de
manera semejante a los juegos de rol, se nos va dando la posibilidad de
utilizar armas más potentes a medida que vamos adentrándonos más y más en la
zona. Si bien es cierto que esto también se aplica a los shoot’em up, en
Stalker siempre podemos volver a explorar territorios donde antes no podíamos
debido a la falta de potencia de fuego. Por lo que en determinados momentos
podemos retomar exploraciones dejadas de lado debido a que siempre nos mataba
el mismo bicho o el mismo enemigo. Y ahora que llevamos un fusil y un blindaje
decentes volver para decirle un par de cosas bien dichas. Además, como no
estamos obligados a hacer las misiones seguidas, podemos tomarnos un respiro y
llevar a cabo alguna misión secundaria que nos premie con algún fusil o
blindaje corporal superior que nos agilice la trama principal. Pero por
desgracia, las armas y el blindaje sufren los efectos del uso, las armas a
medida que las utilicemos irán resultando cada vez menos fiables. Este desgaste
se representa en que se encasquillan en los momentos más inoportunos, algo que
en un principio puede no resultar molesto si el arma es capaz de abatir a los
enemigos con gran facilidad. Aunque esta fiabilidad sigue reduciéndose hasta
resultar casi imposible mantener una cadencia de fuego aceptable, es en estos
momentos donde nos veremos obligados a desechar el arma o venderla. Lo mismo
sucede con el blindaje, a medida que va absorbiendo daño, esta misma capacidad
se va reduciendo. Por supuesto que dependiendo de la clase de blindaje corporal
que utilicemos se verá más afectado por uno u otro tipo de daño. Por lo que
tanto las armas como la protección debe ser renovada cada cierto tiempo. Ya sea
acudiendo a los comerciantes locales o saqueándola de cadáveres o lugares
ocultos que encontraremos a lo largo de toda la Zona.
Como ya he dicho, la variedad de armamento es elevadísima. Exceptuando que el cuchillo no puede ser mejorado y que la cantidad de armamento pesado es mínimo por no decir inexistente. En el aspecto de pistolas, subfusiles, fusiles, rifles y escopetas tenemos para dar y tomar hasta aburrirnos. Cada tipo de arma sirve para un propósito distinto, las pistolas suelen tener excepcional precisión a cortas distancias, algunas de ellas disparan proyectiles de elevado calibre que permiten abatir a casi cualquier cosa tras unos pocos disparos. Pero cuanto más potente sea la pistola menos balas tendrá disponible antes de tener que recargar. Las escopetas son realmente mortales a corto alcance, pero tampoco cuentan con una elevada cantidad de munición y son extremadamente lentas a la hora de la recarga por lo que requieren de una elevada puntería si no quieres llevarte más de un susto al quedarte sin proyectiles en el cargador. Los subfusiles son la mejor opción cuando viajas por las regiones de la Zona cercanas a poblado de los novatos. La bastante precisas a corta y media distancia, gran cargador y una cadencia de disparo más que decente pueden abatir a cualquier bandido o stalker novato sin dificultad. El problema es que utilizan munición de bajo calibre, y una vez te vas adentrando en la Zona, los enemigos cuentan con blindaje bastante resistente a balas de pequeño calibre por lo que la cantidad de disparos requeridos las hacen inútiles o poco recomendables. Ahora llega el turno del arma por excelencia, el fusil de asalto. Stalker nos propone fusiles tanto del bloque soviético como de la Otan. Ambas opciones son factibles, pero tras probar tanto unos como otros, parece decantarse la cosa por las armas de la Otan. La pega, es que los soldados del ejército que salen en el juego, llevan armamento ruso, por lo que es más fácil encontrar munición de estas armas que de la Otan, que solo la llevan los mercenarios y algún que otro stalker. Esto hace que nos veamos obligados a tener que racionar la munición si nos decantamos por armas occidentales. Con los rifles de precisión la verdad es que no he encontrado muchos, la verdad es que como casi todo el juego transcurre en entornos boscosos, subterráneos o edificios abandonados, la mira telescópica de los propios fusiles resultaba más que suficiente para acabar con cualquier enemigo agazapado a menos de doscientos metros. Por lo que no tienen gran uso hasta las fases finales donde si podremos encontrar francotiradores enemigos apostados en los lugares más insólitos. En cuestiones de armamento pesado, algunos fusiles cuentan con un lanzagranadas de baja velocidad incorporado, también he encontrado algún lanzagranadas y un lanzacohetes. Pero no he llegado a tener necesidad de utilizarlos por lo que los he ignorado por completo. Puede ser que esta decisión en la parte final de juego fuese un error, pues son los únicos momentos donde aparece maquinaria pesada tales como blindados ligeros y los impresionantes helicópteros mil-mi. Las granadas imagino que podrían haberme ahorrado balas, principalmente en lugares cerrados, pero la verdad es que tampoco me han resultado útiles, y como en enemigo tampoco las solía utilizar ni siquiera me acordaba de que las llevaba. En definitiva, un buen fusil de asalto, y una pistola grande y potente son más que suficientes para acabarse el juego.
La verdad es que tenía pensado hacer una tabla con todas las armas del juego y la munición que utiliza. Los nombres son inventados, imagino que es debido a la falta de derechos (hasta donde hemos llegado que es necesario adquirirlos para ponerle los nombres a las armas, estamos desquiciados). Pero después de haberme paseado por internet durante unos días me he encontrado con que se ha creado una página muy al estilo de la Wiki, pero dedicada a la saga S.T.A.L.K.E.R., por lo que creo que quizás sea más aconsejable que os deje la dirección de la web, en ella deberíais encontrar todas las curiosidades de esta increíble saga de la Zona.
Stakerpedia: http://stalkerhispano.com/stalkerpedia/doku.php.
Quizás en otro momento me decante por dejaros una serie de tablas con la recopilación de las armas y blindajes corporales, pero por ahora no va a ser en esta aportación. Aunque como en todos mis anteriores comentarios, si que os dejaré los truquillos o trampas para que podáis superar aquellos obstáculos que os puedan resultar más difíciles. Aunque tengo que reconocer que como en cierto modo se trata de un juego de rol abierto, lo que en cierto momento no puedas superar, solo tienes que dejarlo para cuando dispongas de un equipo en mejores condiciones y un arma más grande. Pero a pesar de todo, para todos los que no tengáis paciencia (aunque este juego precisamente no es para gente impaciente) aquí os dejo lo prometido:
Activa la consola con [^] e introduce este código:
g_always_run 1:
Correr sin cansarse.
g_always_run 0:
Desactiva el truco.
Aunque como podéis ver, la verdad es que no hay mucho truco, como ya lo he dicho antes. Es un juego de rol disfrazado de shoot’em up por lo que la mayoría de trucos en realidad son zonas secretas o lugares que debemos explorar. Además de que el juego tiene un truco, mata y saquea todo lo que puedas para después venderlo. Asi que lamento tener que deciros que el truco del STALKER es dedicarle horas, paciencia y sobre todo disfrutarlo sin parar.
En definitiva y para terminar, el S.T.A.L.K.E.R. Shadow of Chernobyl es uno de los mejores juego que he tenido la suerte de disfrutar en estos últimos tiempos.
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